Igualmente, el comerciante puede modificar fácilmente todos los precios en tiempo real, para adaptarse a la oferta y la demanda.
Por ejemplo, es posible vender, una tarta de merengue Pavlova, a 18฿ por la mañana, y 17฿ por la tarde, sin tener que cambiar las etiquetas del precio.
En general, todos los productos que estén a punto de caducar, pueden ofertarse automáticamente estableciendo un algoritmo de precios según el tiempo que queda para su caducidad.